Con las siglas J.E.M.D “Jehová es mi Dios” se puede ver toda la publicidad que
hoy circula, de quién es llamado la ficha clave para revivir la gloria del
Centro Democrático en los Llanos Orientales, tal vez por su acento criollito o
su innegable buena apariencia, Josué Alirio Barrera ha ganado fuerza y
simpatía con sus aspiración al Senado.
Como a muchos colombianos la guerra le pasó factura a muy temprana edad,
convirtiéndolo a él y su familia en víctimas de desplazamiento forzoso
desde la vereda Monterralo, del municipio de Aguazul, hacia la ciudad de
Yopal. Su padre, un hombre temeroso de Dios, con fuertes convicciones y
valores, prefirió marcharse de su tierra, antes que ver a sus hijos reclutados
por la guerrilla.
Durante 10 años convivió con su familia compuesta por 8 personas en la
misma habitación de un barrio de invasión; circunstancia que, lejos de
opacar su anhelo de superación, lo motivó a esforzarse para ser un
brillante negociante empírico, que logró mejorar su futuro y el de su familia
como ganadero, empresario de tierras y domador de caballos.
Este casanareño que estudió solo hasta octavo grado de bachiller, hoy
está felizmente casado y con 4 hijos; como él mismo lo expresa (con un atisbo
de timidez), cuando le preguntan si el público femenino simpatiza por él ser
buen mandatario o por “buen mozo”; está claro que se ve mucho más cómodo y
como pez en el agua, cuando habla sobre sus logros y cómo ayudó a superar la
pobreza extrema su departamento de origen, Casanare.
Este campesino, para el asombro y la incredulidad de muchos, logró obtener un
doctorado Honoris Causa de la universidad de Israel; fue presidente del OCAD
Regional; fue asesor de las Naciones Unidas para el desarrollo en Colombia;
fue Gobernador de Casanare en el período 2016-2019 y hoy es asesor en
administración de empresas agropecuarias.
#HagalePariente, es lo que dicen constantemente los seguidores que lo apoyan
en las redes sociales y creen en sus propuestas:
- Propone impulsar una reforma ciudadana que proteja al ciudadano y la
soberanía del estado.
- Cero intereses en créditos educativos y condonación de deudas para los
reportados.
- Reconocimiento de los derechos de las víctimas del conflicto y la fuerza
pública.
- Reducción de los gastos del estado.
- Acceso a la educación superior.
- Emprendimiento y trabajo para los jóvenes.
- Interconexión regional y vías terciarias.
- Fortalecimiento del sector salud.
- Fortalecimiento del sector productivo con industrialización , ciencia,
tecnología e innovación.
- Mayor conectividad y educación superior virtual para las regiones
- Cierre de brechas en asuntos de género para que las mujeres protagonicen su
propia historia.
- Iniciativa de derecho al voto para la fuerza pública y dignificación de las
reservas.
- Participación religiosa en procesos de transformación social, proyectos y
programas del estado.
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